Todos los meses llegan decenas de CD a nuestra redacción… algunos de metal/heavy/core je, je. Matías y Luis los escuchan y te hacen llegar su análisis concienzudo sobre los últimos lanzamientos. Esperamos que vos también nos hagas llegar tu opinión. En la diversidad, está el gusto.
-Científicos Del Palo “El Maravilloso Mundo Animal” (2015) Sony Music
Género: Rock/ Funk/ Reggae
Puntaje: 9/10
Comienza tenuemente “Prólogo”, y ya me compraron. Es más, este disco hay que escucharlo si o si leyendo el librito, o para los más snob, leyendo el booklet. “El Maravilloso Mundo Animal” es maravilloso. Suena algo redundante, e incluso estúpido, pero lo que ofrece Científicos Del Palo siempre se mereció ese mote. Luego “Tratar De Tratar” arremete con ese rock tan característico que osan practicar estos muchachos. La banda saca a relucir todas sus habilidades a lo largo de casi una hora de pura música en su esplendor. “El Que Más Dispara” tantea con el blues e incluso juega con un ambiente más groovero y pesado y con una frase que los identifica: “Siempre he creído mejor, aunque no he sido un gran trabajador, ser mi propio empleador”. Van pasando los temas, y en el que le da título al disco, volvemos a encontrarnos con la mejor faceta del grupo, la tranquila, esotérica y calma, lo que “El Gran Depredador” termina por confirmar. Fueron pasando las canciones, las escuchas, las letras, los diccionarios y las breves historias. Para llegar a la conclusión que a la música de nuestro país le faltan más canciones como “Milonga De Abundancia”, pese a que no estoy de acuerdo con el mensaje, la segunda oración de su segunda estrofa esconde una clara verdad latinoamericana. Un hermoso disco dedicado para un abuelo. Bravo CDP. MD
-De La Gran Piñata “El Equilibrio Entre Los Opuestos” (2015) Independiente
Género: Rock
Puntaje: 9/10
Rock & roll vieja, no me importa nada. De La Gran Piñata siempre salió adelante, y están en el lugar en el que están gracias a todo el trabajo que vienen gestando, gracias a la buena onda y gracias a no subirse a ningún caballo. Ellos aprendieron a caminar antes que correr, a agradecer antes de insultar. Y “El Equilibrio Entre Los Opuestos” es el disco que se merecen, ellos y la gente que los escucha y los banca. Se animaron, y no se guardaron nada. Reluciendo la “mala onda” de “Tu Can”, el riff de “De Bar En Peor” (que ya habíamos escuchado en su anterior EP), lo sureño en “Lunar”, TODO “Los Asuntos Del Miedo”, el amague de “Trincheras” a stonear un poco, y la emotividad de “Tristeza”. De La Gran Piñata no inventa nada, ni trata de hacerlo, pero se nota que cada idea que emana de sus cabezas, cada melodía que se asoma de sus instrumentos y cada poesía que sufre la prosa, viene directo de su alma. “El Equilibrio Entre Los Opuestos” es. Existe. Y por eso, por traer otro gran disco a nuestros oídos, De La Gran Piñata continua haciendo historia. MD
-Ensiferum “One Man Army” (2015) Icarus Music/ Metal Blade Records
Género: Folk/ Viking Metal
Puntaje: 7/10
“One Man Army” suena un tanto egoísta. Solamente en su concepto, ya que la música ni siquiera había aparecido en el momento que escribía esto. Por eso, ni bien comienza “March Of War“, tenemos lo mismo de siempre, el Ensiferum que nunca se olvidó que el egoísmo es solo para los mal pensados, y que la banda habla por sí sola. Hablando un poco más en serio y sin querer ganar más líneas, hay dos tipos de folk/ viking metal: el feliz cumpleaños a lo Korpiklaani o ganchero a lo Amon Amarth y el de al palo y a la bolsa. Desgraciadamente, Ensiferum es parte de la segunda camada, de al palo y a la bolsa. Porque si bien se tocan todo, y los ambientes mitológicos guerreros nórdicos suenan de la hostia, el doble bombo termina pasándote por arriba en “Axe Of Judgement” tanto como en “Warrior Without A War”. ¿Qué quiero decir con esto? Si no te cabe el género, es muy poco probable que encuentres muy placentero este tipo de discos, quizás un tanto entretenido como a mí, pero hasta ahí nomás. Me sigo quedando con el folk metal de mi país. El folklore de mis pagos. Que los fineses tengan el suyo, yo me encargo del mío. Sin querer sonar tan duro, y para resumir, “One Man Army” es un muy buen disco que mantiene vigente el presente de estos señores. Sólo para fans. MD
-Job For A Cowboy “Sun Eater” (2015) Icarus Music/ Metal Blade Records
Género: Death Metal
Puntaje: 5/10
Está bien renegar de un pasado que los enfilaba más para el deathcore que para esto, pero tampoco la pavada… Mi viejo cowboy ya no es el que era. “Eating The Visions Of God” es la carta de presentación de “Sun Eater”, y ya nos damos cuenta lo que se avecina. Death metal moderno sin muchas vueltas. Algo que hay que recalcar, es el uso de todas las cuerdas de sus guitarristas, ya quedaron atrás los riffs graves y ser rápido por el mero hecho de serlo, acá la pesadez va por otro lado, y este disco es aceptable solamente por eso. Un bajo que emula a Obscura, algunos ambientes que se acercan más a Nile que a Decapitated como en otros tiempos, y un Jonny Davy que ya no sorprende a nadie. Nueve canciones tiene “Sun Eater”, y por primera vez desde 2005, Job For A Cowboy no me rompe la cabeza con ninguno de sus temas, salvo el buen intento de “The Stone Cross”, para volver a caer en los mismos medio tiempos que sus otros 8 compañeros. Esto ya no es un trabajo para un cowboy, este se volvió un trabajo para un buen replanteo de ideas. Que vuelva la mala onda a JFAC de una vez por todas. MD
-Primordial “Where Greater Men Have Fallen” (2015) Icarus Music/ Metal Blade Records
Género: Metal Extremo
Puntaje: 6/10
Black metal de Irlanda… Ok. Es lo que hay, no hay que ser noruego para hacer este estilo. Emm… ¿cómo puedo poner esto sin ser muy cruel o incluso pedante? No sé. Voy a ir directo al grano. Me aburrí muchísimo escuchando “Where Greater Men Have Fallen”. No empiecen con eso de: “ay, no sos metalero” o “no entendés nada”. Gustos son gustos, ¿no? Por eso siempre pedimos que saquen sus propias conclusiones, y solamente léannos para ver nuestras opiniones “especializadas”, después que les guste o no a ustedes, ese es tema suyo. Hablando un poco más en serio, Primordial ofrece algo más rockero o rudimentario, como si lo primitivo se llenara con sus instrumentos y los cambios de horizontes los lleven al heavy metal setentero y ocultista. “Babel’s Tower” si hubiese sido grabado en 1975, sería un himno del metal de todos los tiempos… pero tuvo la mala suerte de ser editado en 2015. Donde a veces la nostalgia juega más fuerte, pero el resultado siempre es el mismo. Es más, a todas las canciones les sucede lo mismo. Es como si estuviesen retrasadas y equivocadas de tiempo. No es lo mío, pero es un buen disco después de todo. Denle una escuchada… y sean más pacientes que yo. MD
-Vesania “Deus Ex Machina” (2015) Icarus Music/ Metal Blade Records
Género: Black/ Death Metal
Puntaje: 3/10
A ver… están Daray (baterista) y Orion (bajista). ¡Ya está, es un discazo de puro black death! (Si no saben quiénes son, búsquenlos, no sean ratas). ¿Ah no? Es que a nadie le da miedo este género. Ya no genera ni siquiera un aluvión de pesadez extrema que nos pase por arriba o nos deje sordos. Y Vesania pifia en su intento de maldad. Pifia… y feo. Porque no terminan de ser más que una simple copia de las grandes bandas del estilo y las voces dejan mucho más que desear, entre lo ridículo y lo blasfemo. Qué se yo… Sigo diciendo que perdí mi oído para estas bandas, pero creo que hasta incluso a los fans del viejo Vesania les va a parecer raro esta nueva incursión discográfica. “Deus Ex Machina” deja mal parada a una banda que siempre estuvo en un huracán de decisiones, idas y vueltas, poca continuación y mucho, pero mucho humo. A otra cosa. Sigamos escuchando a Behemoth. MD
-Mad Old Lady “Power of warrior” (2015) Independiente
Género: Heavy- Power metal
Puntaje: 9/10
Banda paulista de heavy metal que, como anticipa el título de su disco, suena poderosa y aguerrida en sus canciones que parecen destinadas a librar batallas con las letras en inglés, debido a su proyección internacional.
Formado en 2011 por el músico y vocalista Eduardo Parras, el grupo tiene un sonido potente, vibrante y personal, propio de la mixtura del heavy con el power metal.
Se nota además en la placa el trabajo de Tommy Hansen, quien produjo también los principales discos de Helloween. A él se le sumó en el estudio el bajista de MOL, Fernando Giovannetti, para ponerle su impronta.
Este es un disco para que lo escuches imaginándote verdaderas escenas de combate, en las que el guerrero arremete con todo, en medio de una atmósfera de cuento medieval, en la que te sumergen las letras del vocalista. Su voz grave alterna en forma perfecta con pasajes instrumentales de alto vuelo entre partes más aceleradas y otras más lentas y envolventes.
Completan la formación brasileña Guga Bento en batería, Rafael Agosotino en teclados y Tiago de Moura y Timo Kaarkoski en guitarras. La banda conforma una arrasadora declaración de intenciones que llega para conquistar seguidores, como cuando Parras canta en “Viking Soul”: “Nosotros lucharemos todo el tiempo sin preguntarnos la razón”. LD