Con la música en la sangre

548440_507224092623368_1675099614_nAlain Johannes debe ser una de las personas más hiperactivas del planeta. Puscifer, Queens Of The Stone Age, Eleven, y miles de bandas más pasaron por su enorme talento, ya sea como guitarrista o como productor. El pasado 22 de junio se presentó ante un Roxy Live lleno de expectativas y hambre de música. Para ello, nos comunicamos con él horas antes del show, esto es lo que nos contó.

RC: ¿Cuáles son tus expectativas para este show en Argentina?

AJ: Vamos a estar tocando muchas canciones, y ensayamos de manera muy exhaustiva, redescubriendo temas de Eleven y de toda mi discografía. Indagamos cosas que hace 20 años no se escuchaban en vivo. Encontré una nueva entrega de esos temas. Es muy reconfortante. Desde el 2010 que estoy en Chile, que empecé a tocar de otra manera, en formato banda, con gente muy talentosa. Cada vez me siento con más ánimo de presentarme en vivo, no es igual a Eleven, lo cual era la idea desde el principio. Estamos reeditando estos temas para poder darle paso a los nuevos que se vienen. Quiero lograr muchas cosas en este tour, girando con una banda estable y sumergiéndome en la tranquilidad. Esa fue la idea del tour. Me siento más libre de intentar hacer lo que quiero, sin tener que ser un tributo a mi carrera.

RC: Es un homenaje si se puede decir…

AJ: Claro, exacto (risas). Me está ayudando mucho estar girando con gente talentosa y personas que apoyan mi proyecto.

292367_463804880298623_1358770047_nRC: De todos tus trabajos, ¿tenés alguno preferido?

AJ: Pregunta difícil (risas). Si no cuento los discos de Eleven, diría que “EuphoriaMorning” de Chris Cornell. Fue un proceso creativo muy intenso, muy bonito, casi en secreto lo gestamos por siete meses. Fue un periodo muy lindo y lo guardo en mi memoria. Es mi favorito lejos, aunque podría nombrar prácticamente todos.

RC: ¿Fue alguna vez una utopía tu carrera musical? ¿Cómo se dio?

AJ: Obviamente que al principio no entendía todo lo que estaba haciendo, pero me vino en la sangre. Todos en mi familia eran músicos y como tenía buena actitud en el colegio, siempre me apoyaron (risas). Ya a los 17 años, o a los 18, estaba tocando de una manera muy fluida que me hacía sentir muy cómodo. Se fue dando como una experiencia de vida, con cosas buenas y malas, pero de forma natural. Tuve y tengo el honor de trabajar con gente increíble, y lo pienso como un legado del cual me siento muy orgulloso. Una vida creativa, intentar lograr algo nuevo cada día.

RC: ¿Cómo se dio el trabajar con tantos estilos?

AJ: Siempre tiene que ser música que me guste. Me gustan todos los géneros que existen creo (risas). Sobre todo la música autóctona de países como India o de Sudamérica es lo que más estoy escuchando últimamente. Lo importante es que el artista se sienta cómodo y se cree una buena relación de trabajo, dando libertad y sin exigencia, que todo fluya levemente hacia lo que tenga que ser. Mediante la confianza y esa fluidez, todos podemos sentirnos bien para trabajar. No importan los encasillamientos, lo que importa es que no haya stress.

RC: ¿Cuáles son tus planes para el resto del año?

AJ: Ahora salí del estudio para simplificar un poco mi vida. Quiero calmarme (risas). La vida es lo más importante. Había demasiada carga emocional en mi hogar y todo mi entorno, y tenía que bajar varias revoluciones. Todo mi equipo, mis instrumentos y etc. Los delegué a mis amigos. Quiero simplificar mi vida, estar más presente con mi familia, iniciar esta nueva etapa con el trío nuevo que formé y grabar un nuevo disco. Quiero reencontrarme, sé que mi futuro está en los Estados Unidos, pero quiero aprovechar mi tiempo en Chile y tranquilizarme con el trabajo de producción. Bajar la intensidad de trabajo pero continuar activo. Estar más abierto a un calendario va a ser que esté más calmo (risas).

Marcar el enlace permanente.

Comentarios cerrados.