STONER, EL NOMBRE DE LA PSICODELIA

Hablamos con Facundo Llano, uno de los escritores, junto a Carlos Noro, que se encargó de plasmar, gracias a la editorial Gourmet Musical, el gran libro «Stoner Argentino: Rock Pesado & Psicodelia (1995 – 2020)». Consigan esta obra y adentrense en el mundo del stoner…

-¿Cómo surgió la idea de hacer un libro del Stoner Argentino junto a Carlos Noro?

Facundo: La idea surgió porque es una escena de la que fuimos parte como público y periodistas desde principios del 2000. La vimos nacer, crecer y explotar y nos parecía que había una historia interesante ahí, que tenía que ver con cosas que van desde el éxito de Natas en el extranjero hasta le ética DIY de la mayoría de los grupos. Pero principalmente porque sentíamos que, si bien se le decía Stoner, musicalmente estaba mas cerca de tradiciones argentinas, sea el rock argentino de los 60 y 70, pasando por el tango y el folclore. No era una traducción de una moda extranjera. Queríamos ahondar en esos conceptos.

– ¿Cómo fue la experiencia de entrevistar tantas personas relacionadas al género? ¿Alguna anécdota en particular respecto a las entrevistas que te gustaría contar?

Facundo: El libro se hizo mayormente durante la cuarentena, en la época de encierro total. Creo que en ese contexto de parate muchos músicos se coparon con la idea de reflexionar sobre el camino recorrido hasta ese momento. Habían pasado muchos años y creo que muchos no se habían tomado la pausa para pensar sobre todo lo que se había construido, entonces en el contexto de entrevistas largas y cronológicas, creo que muchos músicos se sorprendían hasta de ellos mismos. Algunas entrevistas duraban 3 o 4 horas y solo se usó una parte de esas charlas.

– ¿Cuál fue la parte más difícil del libro?

Facundo: No lo calificaría como difícil, pero digamos que hacer las entrevistas, transcribirlas, seleccionar lo que se va a poner, leer y releer los textos una y otra vez y hacer miles de correcciones lleva mucho trabajo. Que se disfruta, pero requiere dedicación. Particularmente me pasaba que uno tiene una idea de lo que quiere contar, pero llega un momento donde estas tan metido en el proceso que perdés perspectiva. Empezas a dudar si el libro está bueno o si lo que queres contar se entiende. Por fortuna el libro fue bien recibido y los puntos a los que queríamos llegar se entendieron, pero diría que manejar ciertos niveles de frustración que son inevitables a veces puede ser difícil.

– Hay un enorme recorrido por estos primeros 25 años del stoner argentino, ¿sentís que le faltó algo o alguna banda que quizás podría entrar en una suerte de segunda parte o extensión?

Facundo: Algo que tenés que decidir desde el primer momento es que tipo de libro querés hacer. En nuestra búsqueda, decidimos que no queríamos hacer un trabajo enciclopédico sobre el género, nombrando cada banda, cada disco editado, entrevistando a cada musico que haya transitado la escena. Nos parecía que eso iba a poner al libro en un lugar de nicho y no era nuestra idea. Nuestra idea era visibilizar un movimiento y que llegara a la mayor cantidad de gente posible. Podríamos haber hecho un libro de mil paginas que le interesara a unos pocos, pero no queríamos ir por ese camino. La idea era un hacer un libro lo suficientemente accesible para conformar al fan pero también para que el curioso se acerque al género. Por supuesto no es posible conformar a todos, pero me parece que el libro logra un balance adecuado.

– Desde aquel primer disco de Los Natas que se marcó ese gran antes y después en la música emergente argentina, y aún así, se siente quizás que la desaparición de esta banda dejó un gran espacio que todavía no se pudo llenar, ¿cuál es tu opinión respecto al legado que dejó Los Natas?

Facundo: Me parece que Natas aportó muchísimo a la música argentina. Primero es una banda pionera a nivel mundial de un genero que, en ese momento, prácticamente no existía. El primer disco de Natas sale antes que el primero de Queens of the Stone age, antes que Dopesmoker de Sleep, antes que Dopethrone de Electric Wizard. Todos discos claves del genero y una banda argentina estuvo antes que todo eso y tuvo un verdadero reconocimiento en el extranjero, incluso hoy en día con la banda separada hace mas de una década. Algunos dirán “Ya existía Kyuss”, y es verdad, pero me parece que lo mas interesante es que Natas tiene una identidad profundamente argentina. No es la copia de algo extranjero. De hecho, si me preguntas a mí, Natas me parece mucho más interesante que Kyuss. Porque sí, ellos lo inventaron, pero Natas lo llevó a lugares musicales más ricos. Todos los discos de Natas son diferentes y es algo que no se puede decir del resto de las bandas internacionales del género. Y ese fue un gran aporte de Natas influenciado a las bandas nacionales posteriores; que todas tenían un sonido diferente.

– Me sorprendió que en la discografía esencial no apareciera ningún disco de Los Antiguos o Sauron, quizás por estar algo más relacionados al sludge o al doom, ¿hay alguna razón por esto?

Facundo: En una parte del libro profundizamos sobre esto, sobre como en un momento las etiquetas empiezan a ser difusas. Nos parecía que había muchas bandas que formaban parte de la escena pero que musicalmente venían de otro lado. Tal es el caso de Sauron y Los Antiguos, pero también puedo nombrarte Avernal, Pulpo Negro o Banda de la muerte, entre otras. Nos parecía que esas bandas eran simple y llanamente heavy metal. Nos parecía que categorizarlos como Stoner era algo injusto para ellos, sobre todo con Sauron que es una banda que es anterior a Kyuss incluso. Si hay similitudes es justamente porque vienen de lugares parecidos; Black Sabbath y el rock argentino de los 70. Por supuesto que no hay una verdad en todo esto, pero nosotros quisimos marcar esa línea y en el libro profundizamos sobre los porqué.

– ¿Cuál es tu opinión respecto al presente del rock y el metal nacional? ¿Hay alguna banda que te guste en particular?

Facundo: Me parece que, en épocas donde se dice que el rock está muerto, el under (Y no tanto) está pasando por un gran momento. Hay oferta todos los días y bandas increíbles saliendo todo el tiempo. Ahora que el rock no está bajo los reflectores, me parece que hay una generación de gente muy joven que hace rock simplemente porque les gusta, sin ningún tipo de agenda o con intención de pegarla. Ahí es donde salen las mejores cosas. Te puedo nombrar a Buenos Vampiros, Mujer Cebra, Notum Negres, Nenagenix, Kill Flora. Me parece que hay un montón de mujeres mezclando muchas músicas, cagandose un poco en las tradiciones, logrando que salgan cosas nuevas como Lucy Patané, Feli Colina, Marilina Bertoldi. Me parece que hay mucha gente joven acercándose al metal de otra forma, donde el monopolio de los herederos de V8 ya no copa todo y una banda independiente como Against puede llenar un Teatro Flores o Serpentor puede arriesgarse a hacer un Luna Park. Eso hace diez años no se podía. Y después hay un montón de músicos under que vienen hace décadas y todavía tienen ganas de hacer cosas nuevas como Adrian Outeda con Los Pendulos por ejemplo. Y puedo seguir así por largo rato. Hoy más que nunca está todo al alcance de nuestra mano y si no lo ves o no lo encontras, es mejor ser honesto con vos mismo y decir que ya no te interesa descubrir música nueva o sos muy vago para hacerlo.

– ¿Cuáles son tus planes para el 2023 más allá de todo lo gestionado respecto a este libro?

Facundo: Hay ideas para próximos libros, pero nada concreto aún. Después, junto a un amigo tenemos una productora que se llama Convergen, que ya lleva cinco años y siempre tuvimos el lema de “Hacer los shows que queremos ver”. Se trata un poco de eso y de justamente llevarle al publico propuestas que nos parece que están buenas. Es mas interesante estar haciendo cosas que quedarse en el sillón viendo el noticiero.


 

Marcar el enlace permanente.

Comentarios cerrados.