De colores, travesias y psicodelia


Mucho chorus y mucho reverb desde San José, Costa Rica, es lo que clama su página de bandcamp. Y si bien es una manera hermosa de definir la música de estos muchachos, hay algo mucho más allá en ellos. Presentándose como una de las propuestas nuevas de la música emergente hispanoamericana con mayor proyección a futuro, Adiós Cometa tiene demasiadas cosas en su porvenir y que esperemos una de ellas sea una visita al país. Pero, ¿quién mejor que ellos para contarnos todo lo que se avecina?

– ¿Cómo fue el proceso de composición de «La Isla Que Somos»? ¿Cómo llegaron al nombre del título del mismo?

Después de hablarlo por meses, empezamos a tocar juntos a mediados del 2019. Nos juntábamos todas las semanas a tocar, llevábamos ideas y veíamos qué salía. Así poco a poco fueron saliendo las canciones que hoy están en el EP. La idea original de Franco fue idea de John y después la trabajamos juntos hasta que tomó el rumbo que tomó. Norte fluyó espontáneamente en un ensayo, al igual que Luces. Gravedad fue parecida a Franco en cuanto a que yo llevé una idea base y luego la trabajamos todos, y Piel básicamente es una canción de Mark. Entramos al estudio y grabamos primero Franco y Norte, entre diciembre y febrero del 2020, y luego de una pausa por la cuarentena, grabamos Luces, Gravedad y Piel, entre julio y noviembre.

En cuanto al nombre del EP, hace referencia a un ensayo titulado de esa manera, ‘La Isla que Somos’, que escribió un intelectual costarricense llamado Isaac Felipe Azofeifa a principios de la década de 1970. El texto analiza lo que el autor consideraba algunos rasgos característicos del ser costarricense y pues nada, nos gustó la sensación que evocaba el nombre. Sentimos que resumía bien la sensación que en general transmiten las 5 canciones. Aparte de que nos gustó tirar una referencia a la literatura costarricense, jaja.

– ¿Cuáles son sus sentimientos hacia ser la primera banda que Velvet Blue Music edite completamente en español? ¿Qué sienten al ser parte del sello?

Realmente es una locura. Todavía me cuesta creer cómo pasó todo. Honestamente, que te escuchen tus amigos ya es una locura. Que te escuchen los amigos de tus amigos, es aún más loco. Y bueno, que te escuchen fuera del país y que a un sello le guste lo que hacés y quiera invertir en uno, es totalmente surreal. Básicamente, cuando teníamos el EP casi listo, decidí enviarlo a VBM porque los seguía desde hace años y se habían convertido en uno de mis sellos favoritos. Varios de sus artistas influenciaron nuestra música así que dije «ah, qué podemos perder». A las semanas recibimos un correo de Jeff Cloud, el fundador, diciendo que le había gustado mucho el EP y que le encantaría publicarlo bajo el sello. La alegría fue tremenda. Precisamente este año el sello cumple 25 años y está a punto de publicar su lanzamiento número 200. Ser la primera banda completamente en español que editan es un verdadero honor.

– Hay una versatilidad notoria y emotiva a mediado que van sucediendo las canciones del EP, ¿de dónde surgieron las influencias para la producción?

Franco tiene una influencia base de grunge por parte de John. Es vacilón, porque en los primeros ensayos sonaba a punk o a un grunge medio violento, jaja, pero conforme la trabajamos fue tomando un aire más etéreo, especialmente en los arreglos de guitarra, que dirigieron la canción a un terreno más influenciado por el shoegaze. En esa época estábamos bien pegados con Turnover así que definitivamente tuvo que ver. En Norte, seguimos esa misma línea más dreamy y la decisión de que Mark la cantara le imprimió un sonido diferente, además de que abrió la puerta a la idea de que no tendríamos un solo vocalista. Los riffs de esa canción, hechos por John, me encantan. Por otra parte, Luces definitivamente tiene influencia del post punk y también algo de surf rock hacia la segunda mitad de la canción. Gravedad era en principio una canción super emo, al principio hasta tenía pasajes gritados, jaja, pero evolucionó de otra manera. Y bueno, Piel está claramente influenciada por el pasado folk de Mark, quien tuvo un proyecto de ese estilo hace algunos años. En fin, sí, el EP es realmente un collage de todo lo que nos gusta. De hecho no sé cómo funciona. ¿Lo hace? jaja.

– ¿Cómo surgió Adiós Cometa? ¿De dónde proviene el nombre de la banda?

El nombre se me ocurrió a mí, hace como 10 años. Ya ni siquiera recuerdo qué fue exactamente lo que inspiró la frase, pero recuerdo que la imagen que se me vino a la mente fue la de un niño viendo el cometa Halley en 1910, y luego ver a ese mismo niño, ya anciano, viendo al cometa otra vez en 1986. La sensación de nostalgia que me evocó esa idea me pareció muy linda. Recuerdo haber pensado «Adiós Cometa… si algún día tengo una banda le voy a poner así». Y nada, cuando nos tocó pensar en nombres para la banda propuse Adiós Cometa y todos unánimemente dijimos que sí. Se me cumplió el sueño, jaja.

– ¿Qué recuerdan de la grabación de «Franco»?

Fue muy emocionante. Era la primera vez que grabábamos y no teníamos idea de qué esperar. Creo que a todos nos interesaba la idea de dejar un legado, es decir, una constancia de que aquí estuvimos, un registro de esta época de nuestras vidas, que nuestros hijos o nietos pudieran escuchar en el futuro, así que al menos de mi lado lo viví con cierta nostalgia adelantada, si es que eso tiene sentido jaja. Grabamos baterías y bajo juntos, cosa que después Pablo, el baterista, decidió no hacer más porque sintió que tal vez no se concentraba tanto en el click como hubiera querido, jaja, sin embargo siento que eso posiblemente le dio cierta naturalidad o química de corte en vivo a la grabación. Suena crudo, y eso me encanta. Las guitarras vinieron después y por último la voz. No tuvimos mucho problema mezclandola, a diferencia de Norte que nos hizo sufrir, jaja. Y nada, sentimos que en Franco logramos una atmósfera bastante hermosa y única en el EP. Un sonido sombrío, medio violento, pero dulce, que tal vez no se replica en otra parte del EP. Creo que posiblemente es mi canción favorita.

– El arte del disco me remitió mucho al minimalismo y lo onírico, ¿cómo fue la creación del mismo?

¡Qué bueno que sintás eso! Precisamente buscamos ambas cosas. A los cuatro nos gusta mucho la parte gráfica en la música, así que le ponemos mucha atención a ese tema. La foto de la chica en el mar fue tomada por un fotógrafo francés que se llama Eric-René Penoy. Siempre me encantó su trabajo y tuve la suerte de conocerlo en un workshop en México (yo también soy fotógrafo) donde nos hicimos amigos. Un día vi esa foto e inmediatamente se la compartí a los demás de la banda. A todos les encantó, porque sentimos que reflejaba bien lo que tratábamos de evocar. Eric gentilmente nos dio permiso de usarla y Mark diseñó la portada con la ayuda de todos. Desde que lanzamos el primer sencillo, nos gustó que cada lanzamiento tuviera un color en específico: Franco fue azul, Norte rosa y decidimos que el EP sería amarillo. El resto del arte del cassette y CD fue hecho por Fabio Castro, el mismo que diseñó las portadas de Franco y Norte. Eso es precisamente parte de lo que nos gusta de los formatos físicos, el tener el chance de explorar la parte visual más allá de la portada.

– ¿Cómo ven el presente de la música emergente en Costa Rica? ¿Cuáles bandas recomendarían?

Uh, a pesar de que los conciertos evidentemente se detuvieron por la pandemia, están pasando muchas cosas. Creo que ahorita se está en un proceso de cambio generacional. Muchas bandas viejas están inactivas y muchas bandas nuevas, muy jóvenes, naciendo y sacando cosas frescas. En esta nueva camada parece haber unidad, una visión diferente de hacer las cosas y propuestas bastante interesantes. Recomendaría escuchar a Soap, Dylan Thomas, Departments, Sofá Kids, Lentamente, Abbie, Maldito Delorean y Boutique Americana. Hay de todo, para todos los gustos.

– ¿Conocen artistas de Argentina? ¿Tienen pensado en algún momento visitar el país?

Sí, ¡claro! De hecho siempre decimos que si logramos ir a tocar a Argentina, ya podemos retirarnos tranquilos. No, no, jaja, pero fuera de broma, sí es una de las metas que tenemos. Ojalá las condiciones lo permitan pronto. Admiramos a muchos artistas de Argentina. Medalla Milagrosa, de Buenos Aires, fue de hecho una de nuestras referencias desde el principio. También puedo mencionarte a Archipiélagos y Puerto Austral, que tocan un emo hermosamente elaborado. Todo lo que saca Anomalía Ediciones. Península, Plenamente y las Fin del Mundo también nos gustan mucho. A mí, personalmente, también me encantan algunos actos de ambient, como Lumtz y América Analógica. Todo lo que saca el sello Bruma del Sur es hermoso.

– ¿Cuáles son sus planes para el resto de este 2021?

Ya queremos seguir grabando. Realmente disfrutamos el proceso de hacer una canción, ir al estudio, grabarla y producirla. No sabemos si nos dará para sacar un nuevo EP o si serán sencillos aparte, pero ya veremos. Lo cierto es que ya estamos grabando demos y ensayando. Queremos convencer al sello que lo próximo lo saque en vinilo, así, un 7″ bien bonito, así que estamos en eso. Ojalá, también, tocar en vivo antes de que termine el año. ¡Cruzando dedos!

– ¿De qué manera impactó la pandemia para ustedes, ya sea personal como musicalmente? ¿Cómo ven el día a día de la cultura costarricense con esta situación global?

A todos nos afectó de una u otra manera. Musicalmente, tuvo sus pro y sus contras, porque aunque nos atrasó en la grabación y evitó que nos viéramos por varios meses, también nos dio más tiempo libre para hacer maquetas y definir detalles que luego nos ayudaron en la grabación. Acá en Costa Rica se tomaron precauciones relativamente temprano y afortunadamente la situación no se salió totalmente de control. Aunque claro, el turismo básicamente murió por un año, el comercio se afectó mucho y el desempleo creció. Ahorita la situación parece mejorar poco a poco. Esperamos que todo siga bien.

– La última es para que digan lo que quieran

Pues nada, muchas gracias por escucharnos y leernos. Ojalá pronto podamos conocernos en Argentina. ¡Ah! Y si alguien quiere un cassette o un cd del EP, pueden contactarnos por Instagram o Facebook y se lo hacemos llegar. ¡Un abrazo!


Adiós Cometa «La Isla Que Somos» (2021) Velvet Blue Music
Género: Shoegaze / Dream Pop
Puntaje: 85/100

Desde «Norte» a «Piel», en un margen de poco más de 18 minutos, colisionan sentires entre colores y sonidos en 5 canciones que en su simpleza se vuelven inmensas y viceversa. Shoegaze, dream pop, post rock, melodías melancólicas, estribillos pegadizos y un vaivén compositivo que transita en demasía por sentimientos encontrados.
Adiós Cometa posiblemente editó una de mis producciones preferidas del año, y eso que estamos meramente en marzo.


 

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